martes, 30 de marzo de 2021

La casa lobo (2018) - Un cuentos de hadas para adultos

Sección visual de La casa lobo - FilmAffinity

Los efectos hechos por computadora predominan tanto hoy en día que películas en stop-motion como la obra chilena La casa lobo son una rareza. Elaborada con puro material desechable como papel maché, cinta adhesiva, cartón, pegamento y pintura, transmite una atmósfera sucia donde estos materiales se descomponen como cadáveres y se mezclan con otros para crear nuevas formas igual de grotescas. Este constante baile de metamorfosis entre los pasillos de la casa y las tomas cercanas ciernen una nube de claustrofobía que, junto con la constante ausencia de colores brillantes, nos introducen a un mundo oscuro y desesperanzador.

La película trata sobre María, quien para librarse de un castigo y un lobo, huye hacia una casa en principio deshabitada, donde encontrará un par de cerditos que tomará bajo su cuidado. El matiz se torna onírico cuando ve que sus nuevas mascotas desarrollan manos, para gradualmente adquirir forma y comportamientos humanos, interactuando con ellos como si fuera su mamá o hermana mayor.

Este cambio de los cerdos se complica al conocer el suceso que los directores emplearon para construir el guión, la historia de Paul Schäfer, un exmilitar Nazi que huyó a Chile después de la segunda guerra mundial y que estableció en la Colonia Dignidad un centro de tortura y abusos contra menores.

Es ahí donde surgen las cuestiones de estar viendo una metáfora de transformación o un descenso a la locura por parte de María... O tal vez un poco de ambas. La evolución de la historia invita a jugar con las interpretaciones que se mueven entre la fantasía y una visión retorcida de los hechos reales.

La casa lobo dura apenas setenta y cinco minutos, pero tras ver la calidad del resultado se entiende la dedicación y paciencia detrás de cinco años de rodaje y múltiples locaciones (Alemania, Chile, México, Holanda y Argentina). Ganadora de reconocimientos y con un estilo que recuerda a uno de los reyes del stop-motion, el checo Jan Švankmajer, este largometraje es una experiencia que no debe dejar pasar cualquier admirador de la fantasía y el terror.


domingo, 28 de marzo de 2021

The empty man (2020) - Terror filosófico y expectativas subvertidas

The Empty Man': la primera gran película de horror adulto del año es una  extraordinaria pesadilla metafísica

Llamada también "El mensajero del último día" y basada en una serie de novelas gráficas del mismo nombre, The empty man subvierte las expectativas de su tráiler. Lo que en principio luce como una película de adolescentes perseguidos y asesinados por una entidad, se transforma en una verborrea filosófica que causará malestar en quienes lleguen esperando una película "para pasar el rato".

La primera señal que hará dudar de si trata del clásico filme de asesinos sobrenaturales es la duración. Las producciones de ese tipo pocas veces exceden los cien minutos, pero The empty man se prolonga más allá de las dos horas.

La película se arriesga con lo que expone. Su estructura narrativa no es la tradicional y abarca tantos puntos al grado que es fácil afirmar que dividirla en dos partes no hubiera sido descabellado. Con todo y esto, la historia no se saca nada de la manga, todo está ahí, dejándonos las migajas de pan que trazan la ruta a seguir hasta el desenlace.

La mezcla de tonos, los diálogos pesados, la cantidad de personajes que aparecen y los cambios bruscos de locaciones no dan tregua al cerebro de espectador quien deberá adaptarse en más de una ocasión para mantenerse atento. Esta película demanda repetir inclusive escenas que serán densas para quiénes no estén acostumbrados a los términos y corrientes filosóficas expuestas cuando menos lo esperen.

Sentirse abrumado por la cantidad de información no es algo para avergonzarse, es normal, ya que The empty man se sale de los moldes para ofrecer algo más reflexivo, implementando creencias que han sido parte de las dudas ontológicas de más y más personas en los últimos años.

Es mejor verla sin saber qué esperar, pero en caso de querer una idea de hacia dónde se orientará, una de las obras previas del director es un buen precedente sobre lo que se puede esperar: Mediometraje. Se encuentra disponible en la plataforma Vimeo, aunque sin subtítulos.


1BR (2019) - La desintegración del yo

1BR (2019) - Filmaffinity

Las últimas décadas han caracterizado a la humanidad por adoptar el individualismo como la máxima al vivir, destruyendo rituales y aquello que nos daba un sentido de pertenecer algo, de estar en una comunidad. Creemos que hemos sustituido esta carencia mediante las redes sociales y la comunicación inmediata a distancia, pero esto sólo ha acrecentado el problema, pues al no estar en contacto directo con las otras personas, sino mediante un dispositivo, se acentúa la sensación de que el mundo gira en torno a uno, al individuo.

Para combatir estos extremos, el ser humano tiende a crear un opuesto igual de radical que el enemigo, y 1BR trata sobre este malestar social. ¿Cómo atacar el individualismo que ha permeado en las ciudades y sus estratos sociales?

Crea un grupo donde el bienestar de la comunidad sea el fin último, donde dejes de existir como persona y cedas tu libre albedrío, donde regales el control de tu vida por beneficiar a una sociedad, la transparencia descubra tus secretos, los sueños sean oprimidos y donde se deshagan de ti cuando dejes de contribuir a ésta. En otras palabras, desintegrar tu yo.

Y aunque estas situaciones ya ocurren en nuestro mundo de manera dispersa y no son nada nuevo, acá se encapsulan y exploran en una escala menor, en un complejo departamental. Es a través de Sarah, quien se va de casa y llega a Los Ángeles para iniciar una nueva vida, que descubrimos cómo nos diluiríamos en esta comuna que en un principio pretende ser utópica, pero que colisiona con nuestro concepto de individuo conforme más permanecemos en ella.

La película pudo ser más contundente en lo filosófico y exponer la fricción de uno por mantenerse íntegro, pero opta por una vía más ligera donde apenas y nos metemos a la cabeza de Sarah, dejando el desarrollo de su conflicto de un modo tan sutil (mediante gestos fácil de obviar), que el final puede resultar insatisfactorio y muy repentino.

1BR es una especulación sobre las sectas que "combatirían" el individualismo, y un grito de cómo nuestro yo reaccionaría, huyendo aterrorizado entre estas comunidades.


Nope (2022) - Domesticando lo imposible

  Hay tres elementos necesarios para descifrar qué hay detrás de Nope , Oprah Winfrey , la mentalidad positivista de hoy día y la filosofía ...