La formación de un criminal no es un factor tan sencillo como la ficción suele mostrar, torciendo cómo se moldean estas personas y creando perspectivas erróneas que llevan a la idealización del psicópata y los asesinos seriales, una visión que ignora su trasfondo y los encasilla como seres inteligentes, implacables o seductores (o los tres juntos en casos más extremos, como Hannibal Lecter).
Monster de Naoki Urasawa tiene a uno de los villanos más memorables del manga, Johan Liebert, y esto se debe a múltiples factores, capas que van construyendo cómo un niño termina siendo un monstruo, y mediante su influencia, engendrando otros en quienes lo rodean.
El inicio de la historia es lo más conocido de la saga, el doctor Kenzo Tenma, neurocirujano estrella del hospital, cae en un dilema cuando le mueven a operar a alguien de renombre en vez de "un don nadie" que llegó primero. Cuando el paciente desconocido fallece, Tenma se propone no repetir aquello y no tarda en ponerlo en práctica cuando opera a un niño con una herida de bala en la cabeza e ignora a uno de los contribuyentes más importantes del hospital, quien muere por estar en manos menos capaces. Esto propicia la caída de Tenma, volviéndose un médico más en la nómina, extinguiendo su prometedor futuro. La situación se complica más cuando gente a su alrededor muere, y él es el principal sospechoso, por lo que deberá ser un fugitivo y comprobar, para incredulidad de todos, que el asesino es el niño que salvó.
Es fácil pensar que Monster es un simple juego del gato y el ratón donde Tenma y el niño, Johan, no paran su persecución hasta el final. Y aunque a grandes rasgos, la historia es así, los pormenores la distancian de este modelo, pues habrá varios capítulos donde Tenma ni aparece, y ni qué decir de Johan, que funciona más como un símbolo, pues casi siempre vemos las consecuencias de sus acciones, y rara vez cómo las ejecutó o manipuló, dándole un manto mitológico, fungiendo como un fantasma.
La cantidad de personajes que desfilan por la obra es descomunal, lo que es bueno en tanto a variedad, pero cansado cuando uno aprende la fórmula del autor, quien da un trasfondo a cada uno, siendo innecesario en ocasiones.
El ritmo con el que se desgrana el misterio detrás de la personalidad homicida de Johan es lento y va pasando por diversas etapas, hurgando cada vez más profundo en la historia, revelando cómo el joven terminó siendo el monstruo que todos admiran o temen. Entre las variables que determinan esta personalidad están...
*****Spoilers*****
... la madre que daba preferencia a su gemela, Anna, siendo Johan su sombra y creando tanto un complejo de inferioridad, como también de admiración por su hermana, tomando incluso momentos de su vida como si fueran suyos; la falta de un nombre por parte de su madre que lo diferencie de su gemela y le permita forjar una identidad, lo que lo convierte en una esponja que absorbe lo que se le presenta, desesperado por encontrar a qué aferrarse; las ideas que recibe por parte de los adultos que experimentaban con niños en sus primeros años no fomentaban la empatía y la compasión, pero sí una apatía y utilitarismo donde los seres humanos se vuelven herramientas; la historia del "monstruo sin nombre" (de donde adopta Johan), un cuento que se vuelve fundamental en su búsqueda por tener un yo y la adopta como estandarte; la falta de un hogar que dé estabilidad y permita forjar vínculos con unos padres que lo reconozcan como persona y otorguen el amor que tanto necesitaba para deshacerse de las ideas sociopáticas que pululaban en su cabeza. Hay más variables, pero éstas son las más importantes que trazan cómo Johan se convierte en un manipulador sin escrúpulos, en un vacío lleno de demonios que pelean por construir su ego. Esto deja una gran pregunta en el aire, ¿hubiera Johan llevado una vida funcional de haber tenido un hogar donde lo amen desde pequeño?
*****Fin de spoilers*****
Las historia es muy rica en matices, atravesando por conflictos morales y éticos, filosofía, psicología, espionaje, experimentos y neonazismo. Sea el momento que sea, hay algo que siempre persiste entre las sombras de Monster, y es que a pesar de que la maldad domine el panorama, habrá alguien dispuesto a ir al contrario y hacer lo correcto, aunque eso lo ponga en peligro.
Con personajes entrañables y un final que hasta el día de hoy sucita discusiones, Monster es una amplia exploración sobre las dificultades de la vida y mantenerse fiel a los principios en los momentos más oscuros, es un obra compleja que, aunque tiene sus fallas, éstas no la demeritan del lugar al que se ha hecho acreedora y ser considerada de las mejores obras en manga.
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